Él se cayó en la tentación 33
Para pagar el tratamiento médico de su hermana, Thea sacrificó su virginidad por un alto precio, vendiéndose a un desconocido llamado Jeff. Un año después, durante una reunión con los amigos de su pretendiente Gavin, volvió a encontrarse con Jeff. Este la reconoció y se enfrentó a ella en un lugar apartado. Presa del pánico, Thea huyó de nuevo a la sala privada, pero Gavin tiró de ella para que se enfrentara a Jeff una vez más. Gavin le dijo que solo Jeff tenía la medicina que podía salvar a su hermana. Tragándose su orgullo, le suplicó humildemente que le diera el medicamento, pero Jeff se mostró implacable, decidido a reavivar la pasión de aquella noche inolvidable...