El Príncipe Cory, un formidable contendiente en la lucha por el trono, estaba destinado a no vivir más de treinta años a menos que tuviera sexo con una mujer especial. Tras diez años de búsqueda, no había encontrado a nadie. Mientras era perseguido, chocó con Sheri, una novia que iba de camino a su boda, y se emocionó al descubrir que ella era la mujer que había estado buscando desesperadamente. Se la llevó a la fuerza.

Ayden donó anónimamente un riñón a Helen, pero cayó en desgracia y fue forzado al exilio. Años más tarde, al borde de la muerte, se reencuentra con ella. Para entonces, Helen tiene un nuevo novio, Ethan, quien, consumido por los celos, atormenta a Ayden. Helen, debido a malentendidos del pasado, permite el abuso. Al final, cuando su vida se apaga, Ayden decide perdonar, un acto que le trae justicia contra sus agresores y le concede una segunda oportunidad para vivir.